Airef vaticina que los pensionistas españoles perderán un 7% del poder adquisitivo en 2022

Los pensionistas españoles perderán el 7% de su poder adquisitivo en 2022, teniendo en cuenta la situación actual de la Seguridad Social que sólo permitirá una subida anual del 0,25% y el escenario de precios previsto. Lo vaticinó el presidente de la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (Airef), José Luis Escrivá, en su comparecencia en la Comisión de Seguimiento y Evaluación de los Acuerdos del Pacto de Toledo del Congreso de los Diputados. A pesar de todo se mostró optimista en cuanto a la tasa de sustitución prevista que “se estabilizará”, pero si no se toman medidas adicionales se mantendrá igualmente un desequilibrio de la Seguridad Social en torno al 1,5% del PIB hasta principios de la próxima década.

Con el horizonte puesto en 2022 señaló, será de aplicación un IRP del 0,25% a lo largo del periodo, lo que en la práctica llevaría a una probable pérdida del poder adquisitivo de las pensiones, pero se mantendría la relación entre la pensión media y el salario medio. Además, de mantenerse este desequilibrio del 1,5% del PIB en la Seguridad Social, explicó Josè Luis Escrivá, será difícil que el déficit estructural del conjunto de las Administraciones Públicas baje del 2,5% del PIB, siendo la Seguridad Social responsable del 60% del mismo. El presidente de la Airef dijo que la única forma de hacer frente a este desequilibrio de la Seguridad Social sería aportando al sistema cada año una cantidad equivalente al 1,5% del PIB (en torno a 15.000 millones de euros anuales) hasta principios de la década. El resultado sería el reequilibrio del sistema y la revalorización de las pensiones por encima del mínimo del 0,25%, pero todo ello a costa de un aumento del gasto público en pensiones a medio plazo, que implicaría un incremento de la deuda, de la presión fiscal y/o reducción de otros gastos.

Durante su comparecencia, anunció que Airef está trabajando en una ‘Opinión’ que analice en profundidad la situación real del sistema de pensiones español y dé pie a la adopción de medidas en el seno del Pacto de Toledo para garantizar la sostenibilidad del mismo. “A largo plazo hay que actuar con prudencia y en base a estudios más profundos”,  que agregó que “para llevar a cabo dicho análisis es necesario que la propia Seguridad Social se involucre en los ejercicios proyectivos incorporando sus conocimientos y fuentes de información, con una mayor transparencia.”