La nueva edición del Pulso Demográfico de Allianz estudia las implicaciones de los seguros de Vida y pone de relieve su importancia, seguridad y rentabilidad. El análisis se elabora bajo la premisa de que estos productos no son unos meros productos de inversión, también cubren riesgos relacionados con la vida del asegurado, entre ellos una muerte prematura o una incapacidad laboral. Además, destacan que su importancia crece a medida que aumenta el nº de jubilados y decrece el de trabajadores. Sin embargo, la crisis financiera y los bajos tipos de interés están poniendo a prueba este producto, que celebraba en 2012 su 250 aniversario, de modo que la pregunta que se hacen es, ¿qué pasaría si no existieran los seguros de Vida?

Las tendencias demográficas indican que el producto está adquiriendo cada vez más importancia: "Como las sociedades envejecen paulatinamente debido al aumento de la esperanza de vida y a la disminución de la tasa de natalidad, la demanda de ahorro privado continuará creciendo en el futuro", afirma Michael Heise, economista jefe de Allianz SE. Completar la pensión pública con el ahorro privado es cada vez más importante, según el estudio, para mantener el nivel de vida, más si se tiene en cuenta que muchos países están realizando recortes en materia de pensiones, ya sea directamente (con medidas para reducir más el nivel de las pensiones), o indirectamente (con medidas para elevar la edad de jubilación). Además, el Pulso Demográfico Allianz destaca que si no existieran los seguros de Vida, los mercados de capitales también sufrirían consecuencias, ya que estos productos, con su política de inversiones a largo plazo, ayudan a estabilizarlos. "Es más, las políticas conservadoras de inversión de las compañías aseguradoras han librado a muchos clientes de fuertes pérdidas durante la crisis. El seguro de Vida es importante, seguro y rentable para las personas", resume Heise.