Las aseguradoras que facturen más de 10 millones financiarán al Estado a un tipo cero

Todas las empresas que facturen más de 10 millones de euros tendrán que afrontar un tipo mínimo del 23% en los pagos a cuenta del Impuesto de Sociedades. Esa medida afecta de lleno a las aseguradoras cuya facturación supere los 10 millones. En la práctica supone que las grandes empresas españolas financiarán al Estado a coste cero.

El Gobierno aprobó el viernes la modificación del Impuesto de Sociedades a las grandes empresas para cumplir la senda del déficit público acordada con la UE. La vicepresidenta del Gobierno en funciones, Soraya Sáenz de Santamaría, ha afirmado que el objetivo es aumentar los ingresos por ese impuesto, aunque dice que “no se trata de una subida fiscal, sino de un cambio en la metodología de los pagos fraccionados que deben realizar las empresas”. La medida se calcula que afectará a cerca de 9.000 empresas en España, que son las que facturan más de 10 millones de euros.

El Real Decreto fija un tipo mínimo en el pago fraccionado del 23% sobre el resultado contable; el porcentaje será del 25% para los bancos y las petroleras. La norma ya está en vigor, tras publicarse en un BOE extraordinario el viernes. Supone que las grandes empresas tienen que ponerse a trabajar ya: en los dos pagos fraccionados que quedan este año (octubre y diciembre) las empresas afectadas tendrán que ingresar las cantidades correspondientes.

Además, el nuevo régimen de pagos se extenderá hasta que España reduzca su déficit público por debajo del 3% del PIB. El acuerdo con Bruselas sitúa en 2018 el plazo para que el déficit baje del 3%, por lo que la medida estará en vigor al menos hasta ese año.

El ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, cifró el viernes en un 8.000 millones de euros más lo que se recaudará con el nuevo sistema.

Críticas desde la CEOE

CEOE considera desproporcionada y excesiva la decisión” adoptada por el Consejo de Ministros. Tras conocerse la aprobación de la medida la patronal señaló que implica que “las empresas financiarán al Estado a un tipo cero, soportando la mayor carga del esfuerzo para la reducción del déficit. Este dinero anticipado por las empresas no podrá, por tanto, ser dedicado a la inversión, con el consiguiente impacto en la creación de empleo”.

La CEOE advierte de que también puede provocar problemas en la solvencia de las empresas a corto plazo “suponiendo en algún caso una revisión de la calificación crediticia concedida con el consiguiente encarecimiento de la financiación”. Igualmente, afecta a la competitividad, dado que las compañías de otras jurisdicciones que no están afectadas por medidas de este tipo, “disponen de más liquidez para acometer inversiones y proyectos de investigación, a la vez que su financiación será más barata”.

Concluye expresando que el nuevo sistema “impone una carga desmedida sobre las empresas”, al ser las que asuman la mayor parte del esfuerzo de reducción del déficit.

Los agentes de seguros se libran

Los agentes de seguros se han librado de la medida. Cuando en julio el ministro de Economía en funciones, Luis de Guindos, avanzó el compromiso con la CE de fijar para 2017 un tipo mínimo en los pagos a cuenta del Impuesto de Sociedades, no quedó claro qué tipo de empresas se verían afectadas.

Muchos agentes de seguros pertenecen a ATA y su presidente, Lorenzo Amor, dijo entonces que “espero que esa propuesta de subir los pagos a cuenta del Impuesto de Sociedades no afecte a microempresas... sería una torpeza macroeconómica”.