Coface advierte sobre los problemas estructurales de Brasil

Coface considera que a pesar de que Brasil superó la prueba de la crisis de 2009, el modelo de crecimiento ha fracasado y la prueba son las recientes protestas sociales. Disminuye la desigualdad pero sigue siendo significativa y debido a la limitación del mercado laboral y a las principales deficiencias en la infraestructura, el ‘coste de Brasil’ es una pesada carga sobre el rendimiento de las empresas. La entidad alude a los problemas estructurales, con un modelo de crecimiento impulsado por el consumo que se ha venido abajo.

"El remedio para la estanflación brasileña no se encuentra en la política económica, sino en las reformas de educación, salud e infraestructura. Esto también se alinea con las demandas provenientes de la indignada clase media, que ya no queda satisfecha con el mero consumismo. A pesar de que el presidente Dilma Rousseff afirma que va a responder a la situación, los resultados sólo se verán a largo plazo”, observa Yves Zlotowski, economista jefe de Coface. Pero, pese a todos los obstáculos, la compañía cree que Brasil sigue siendo atractivo para las empresas.