El Gobierno obligará a los directivos a tributar a su marginal en el IRPF por la cuantía que exceda de 100.000 euros en las aportaciones de las empresas en forma de Planes de Pensiones o primas de seguros colectivos, según enmiendas que el PP ha introducido en el Senado a la Ley Tributaria que acompaña a los Presupuestos de 2013. Estos cambios elevan la fiscalidad de las indemnizaciones y tratan de evitar que los directivos sorteen esta penalización mediante diferimientos que se estaban produciendo en la tributación de aportaciones satisfechas por las empresas en Planes de Pensiones y primas de seguros, publica Expansión.

Con el fin de pagar menos impuestos, algunos directivos recibían seguros y Planes de Pensiones que sólo tributaban en el momento de su rescate, según la regla de la exención del 40% hasta 300.000 euros en concepto de renta irregular. Y las empresas también retrasaban el pago de estas rentas a sus ejecutivos. Pero ahora se establece un límite anual de 100.000 euros de primas en los contratos de seguros colectivos satisfechas por la misma cantidad a cada contribuyente. "La imputación fiscal de primas de los contratos de seguro será obligatoria por el importe que exceda de 100.000 euros anuales por contribuyente y respecto del mismo empresario, salvo en los seguros colectivos contratados a consecuencia de despidos colectivos realizados de conformidad con lo dispuesto en el artículo 51 del Estatuto de los Trabajadores", dice la enmienda. Por encima de esa cifra, el beneficiario deberá imputárselo fiscalmente de forma obligatoria. Esto implica que los directivos tributarán cada año al tipo marginal del IRPF, de entre el 52% en Madrid y hasta el 56% en Cataluña, por la cantidad de la prima que supere los 100.000 euros.