La última jornada de Forinvest analizó la nueva gestión de los seguros a raíz de los cambios tanto normativos como en el cliente que se están produciendo. El director de Distribución de Liberty Seguros, Álvaro Iglesias, señaló que el seguro se encuentra en la época del humanismo, donde están aflorando nuevos modelos más colaborativos y donde la persona tiene mucha más importancia a la hora de diseñar productos, en pensar cómo comunicar o cómo ofrecerle servicios asistenciales. Cree que “el seguro se enfocará más desde las personas”. Señaló que hoy “no se pueden cometer errores”, tanto compañías de seguros como mediadores, porque la repercusión, en redes sociales, es tremenda.

Juan Luis Cavero, director general de Generali, afirmó que la adaptación de todo el sector está siendo muy alta y refrendó que “nuestro futuro está con el cliente y con el mediador profesional”. Quiso distinguir entre lo tradicional y lo profesional, señalando que estos últimos no tienen que tener miedo al futuro ni a otros canales de distribución. Indicó que es necesario aumentar el ratio de póliza por cliente -está en una media del 1,6 global, con el 1,4% en mediadores y 1,7 en agentes- de manera que si otro canal se lleva una póliza, nunca se llevará al cliente.

Enrique Jorge Rico, director general de Unión Alcoyana, incidió en los cambios que se están produciendo y reconoció que se han incorporado de forma disruptiva, cambio las formas de trabajar.  

No socios, sí partners

El presidente de Aprocose, Maciste Argente, introdujo en la mesa redonda el punto de mayor debate analizando la relación entre compañías y mediadores. Indicó que la labor de las aseguradoras es obtener más prima, pagar menos siniestros y seleccionar mejor los riesgos, en cambio la de los mediadores está más orientada a defender al cliente. Por ello manifestó que “no somos socios, son nuestros partners”. Aseguró que los clientes de los mediadores “se sentirían mal” si fueran socios, aunque dejó claro que “las relaciones son de respeto mutuo”. Ante el revuelo puntualizó que “no hay enfrentamientos” y tan legítimo es estar en un lado como en el otro y añadió que las compañías pagan bien los siniestros pero su objetivo es pagar menos.

El director Técnico de Coinbroker, Eusebio Climent, puso el foco en la rentabilidad, un elemento “imprescindible”. Señaló que en la mediación ha bajado y necesitan ahora apoyo de las compañías y matizó que no se trata de comisiones.  Indicó que las corredurías tienen que seguir avanzando en conceptos como el tamaño o la especialización.

Florentino Pastor, presidnete de ACS-CV, enumeró cuestiones que habrá que resolver como si el consumidor está bien protegido, si el tamaño de los mediadores es el adecuado, cómo será y a quién va a proteger la transposición de la IDD o si el cliente está defendido ante la “coacción” de algunas ventas.

No engañarse

En la jornada también partició Francisco Muñoz-Murgui, vicedecano de Postgrado e Investigación de la Facultad d´Economia de la Universitat de Valéncia. Indicó que la crisis ha ajustado los márgentes de todos, pero no la actividad “con lo que hay que alimentar a las mismas bocas”. Incidió en la guerra de precios y destacó que “no podemos hacer descuentos si el actuario ha puesto un precio” porque “si se deteriora el producto” pasará como el sector de la banca. Animó a recuperar el resutado técnico, máxime ahora que el resultado financiero cae y “ya no está ese colchón”. Finalizó señalando que “no nos podemos engañar”.