La familia Guilló Muñoz vende Cahispa a Javier Pintó

Cahispa, intervenida por la DGSFP desde hace tres años, ha cambiado de manos. Según Expansión, la familia Guilló Muñoz ha traspasado sus acciones al economista Francisco Javier Pintó, ex presidente de Grand Tibidabo, tras no aceptar finalmente la oferta de compra formulada por un grupo de inversores catalanes integrado por Fernando Möller, Fernando Pérez Sala y Xavier Buysé. También Caser se interesó por Cahispa. El nuevo dueño de Cahispa es propietario de la consultora empresarial Interlegere Gestió y es administrador de más de treinta sociedades. En 1997 fue nombrado presidente de Grand Tibidabo. La DGSFP ha emplazado al nuevo propietario a presentar este mismo mes un plan de negocio que asegure el futuro de Cahispa, que tiene una cartera de 150.000 asegurados.