Fecor examina los errores más comunes en los procesos de sucesión familiar

En entrevista con Fecor, Pilar Saldaña, directora de la Cátedra de Empresa Familiar de la Universidad de Barcelona, subraya que “las empresas familiares están afrontando mejor la crisis, son más rentables y competitivas, las impulsa la visión largo plazo, la tradición y atención al cliente”. El encuentro con Saldaña es previo a la celebración de las jornadas de formación que organiza la Federación sobre la Sucesión en la Empresa Familiar, con el patrocinio de Mapfre. En la entrevista insiste en que “tener definido un buen plan de sucesión familiar en la empresa mejora la comunicación en las relaciones familiares, se entra en una atmósfera de ver ‘el conflicto’ como una adaptación/crecimiento del sistema. El paso del tiempo, hace que los familiares tengan necesidades distintas, y el ritmo de crecimiento de la familia suele ser mayor que el de la compañía para no tener sorpresas un buen plan deja claras las reglas del juego”.

Pilar Saldaña recomienda que “a 5 años vista de que se vaya a ceder la batuta del negocio por jubilación es el momento ideal para, quién lo tenga ya, empezar a planificar la sucesión”. Y entre las numerosas observaciones que apunta en la entrevista advierte que “el gran peligro de no tener un plan de sucesión: firmar la venta del negocio. Si un fundador funciona sin plan -no lo tiene o está en su cabeza sin recogerlo por escrito-, ni comunica nada ni a familiares ni a los empleados valiosos claves, éstos se desilusionan con su proyecto y se van los primeros de la empresa o ya no entran a trabajar en la misma o solicitan liquidar su participación”.