El Instituto Aviva invita a fijar estándares mínimos en cada informe anual de pensiones

El contenido del Libro Blanco de la CE 'Una agenda para unas pensiones adecuadas, sostenibles y seguras' es positivo, según la valoración del Instituto Aviva de Ahorro y Pensiones, que considera que el trabajo plantea cuestiones de gran importancia para garantizar el futuro de las pensiones en Europa. También estima que el marco establecido por la CE está línea con las recomendaciones del Foro en su primer informe 'La reforma de las pensiones públicas'.

Para Guillermo de la Dehesa, presidente de Aviva España y chairman del Foro, "ha llegado el momento de proporcionar un enfoque novedoso un acuerdo entre la Comisión Europea, los países miembros y el sector asegurador con el fin de promover una cultura del ahorro más profunda. El Libro Blanco es un paso positivo y en la dirección correcta, pero es necesario que se tomen acciones en firme rápidamente". Otra de sus valoraciones se refiera a que "cambiar las actitudes de la personas frente al ahorro y ayudarles a comprender mejor las decisiones financieras que necesitan tomar, son las metas defendidas desde el Instituto Aviva de Ahorro y Pensiones y estamos muy satisfechos de ver que la Comisión Europea comparte este enfoque".

Por su parte, Ignacio Izquierdo, consejero delegado de Aviva, recuerda que en el informe lanzado en noviembre por Aviva "se ponía de manifiesto cómo la concienciación sobre cuánto esperan las personas recibir en su retiro les animaría a pensar sobre su planificación de cara a la jubilación. Por ello estamos convencidos de que proporcionar un informe anual sobre pensiones instaría a los consumidores a tomar medidas". Y añade: "Todos los ciudadanos europeos deberían recibir, anualmente, un único informe que les permitiera estimar los ingresos que recibirían de cara a su jubilación y que integrara tanto pensiones públicas, como de empleo y privadas. Animamos a la Comisión Europea, Estados Miembros e industria aseguradora a trabajar juntos para establecer unos estándares mínimos en los informes anuales de pensiones y evitar que los ciudadanos reciban información divergente”.