José A. Herce (AFI): "Las cuentas nocionales no son privatizar el sistema público de pensiones"

El Instituto Aviva ha presentado el estudio Pensiones en transición, un análisis comparativo de los sistemas de pensiones en 19 países y agrupados en 6 modelos que ejemplifican todos los casos que se dan el mundo. Se trata de una “herramienta para la reflexión, no una propuesta de reformas”, en la que se observa que, a pesar de lo que a veces pensamos, en todos los países el debate sobre las pensiones está abierto y en todos se detecta una sorprendente homogeneidad sobre los problemas que se deben atajar: el aumento de la esperanza de vida y en consecuencia el incremento de la edad de jubilación, el debate entre sistemas públicos o privados o la introducción de las cuentas nocionales. “En todos los países cuecen las mismas habas”, afirmó José Antonio Herce, director asociado de AFI y miembro del Foro de Expertos del Instituto Aviva encargado de presentar las conclusiones del informe. Por lo tanto, cuando los problemas son comunes, las soluciones no deberían ser divergentes.

En los 6 modelos analizados -anglosajón, Europa Central, Europa del Sur, nórdicos, emergentes y Asia-  conviven sistemas de reparto y de capitalización. El modelo anglosajón, con una tasa de sustitución elevada y predominio de las pensiones de capitalización privada estaría en un extremo de este abanico. Europa Central con tasas de sustitución más bajas y escasa presencia de pensiones de capitalización ocuparía el otro extremo.

En cuanto a la edad de jubilación, el informe también revela similitudes situándose en los países avanzados entre los 65 y 67 años para el año 2020. En los países emergentes, con menor esperanza de vida, la edad legal oscila entre los 55 y los 60 años, con tendencia a subir según suba la esperanza de vida.

La tasa de sustitución es uno de los puntos en los que más diferencias se detectan entre los países y los modelos. En general en el ámbito anglosajón la combinación de pensiones públicas y privadas genera ingresos generosos. EEUU o Canadá tienen mejores tasas de sustitución que nosotros y además más baratas y lo consiguen con menor esfuerzo. “Esto da que pensar”, afirmó José A. Herce.

En Europa del Sur con modelos basados en pensiones públicas, la tasa se sitúa actualmente en el 80%, pero con un alto riesgo de sostenibilidad. En España estamos en el 80% pero se bajará al 50% en el sistema público. “Pero si somos astutos y empezamos a ahorrar no más, pero sí mejor podemos mantener tasas altas”.  “En España hay ahorro suficiente”, dijo. 

No es verdad que no vayamos a cobrar pensiones

Sobre financiación y sostenibilidad, el informe señala que el método de reparto, difícil de sostener, comienza a acercarse en muchos países al de capitalización al introducir las cuentas nocionales. En la mayoría de los países, además se respeta el principio de no someter a imposición ni las aportaciones ni las prestaciones.

En este punto José Antonio Herce se detuvo a hacer importantes matizaciones. “Introducir las cuentas nocionales no es privatizar el sistema público de pensiones”, dijo.Decir esto es un infundio que solo puede salir de la mala fe”.  Las cuentas nocionales, explicó, no son más que una equivalencia actuarial entre lo que se cotiza y lo que se paga en forma de pensión durante el resto de la vida del pensionista, pero el sistema sigue siendo de reparto. 

Herce también aprovechó para enviar un mensaje de tranquilidad a los futuros jubilados. “No es verdad que no vayamos a cobrar pensiones”.  El 50% de la población piensa que no va a cobrar pensión y “eso es una barbaridad”. “La verdad es que no vamos a cobrar la pensión que nos gustaría”. “La verdad es que siempre nos pagará el sistema público una pensión como ha sucedido desde hace 130 años y como sucede en todos los países del mundo”, aunque la cuestión es cómo y en qué proporción de nuestro salario. Aquí es donde hay que trabajar poniendo la mirada en la sostenibilidad del sistema, la suficiencia y la cobertura de la pensión.

En cuanto a la fiscalidad “lo más sensato es no someter a imposición las cotizaciones o las aportaciones. Liberarlas por completo. Hay que desgravar íntegramente las aportaciones y cotizaciones, lo mismo que sucede ya con la retención de la Seguridad Social. Las cotizaciones a la Seguridad Social están íntegramente desgravadas de la base del IRPF, de la base del Impuesto de Sociedades y de todos los impuestos”, señaló el experto.

En resumen, tras esta comparativa se concluye que todos los países del mundo se encuentran en un momento de transición y que las tendencias en materia de reformas van encaminadas a adaptar la edad de jubilación a la esperanza de vida, a la separación entre pensiones básicas y complementarias obligatorias, a la transformación del reparto en capitalización actuarial mediante las cuentas nocionales, a la jubilación activa compatibilizando pensión e ingresos laborales y a la limitación de la cobertura de supervivencia dejando paso a la cobertura de dependencia. Tan solo un pequeño grupo de países: Australia, Singapur y Suecia han iniciado ya reformas de verdadero calado a largo plazo que pueden ir abriendo el camino al resto del mundo.