Línea Directa sacrifica el crecimiento del beneficio por mantener los precios en Autos

Línea Directa no incrementará los precios en Autos, al menos de momento. El consejero delegado de la compañía, Miguel Ángel Merino, ha anunciado durante la presentación de los resultados de 2015 que Línea Directa va a abosorber el impacto del Baremo de Autos, de Solvencia II, de la mayor frecuencia siniestral y de unos tipos de interés bajos con la consiguiente reducción de los rendimientos financieros. La entidad, según explica Merino, está preparada para aborber ese impacto gracias a que trabaja con un margen del 19%. No obstante, advierte que estarán muy atentos a cómo transcurre el año y, en cualquier caso, no habrá subidas generalizadas, sino que se segmentán y afectarán sobre todo a los clientes que tengan peor resultado siniestral.

Muchas compañías del sector no podrán seguir el ejemplo. Según advierte Miguel Ángel Merino, “con un ratio combinado en Autos del 100%, si el sector no sube primas en 2016 se colocará en el 104% y entrará en pérdidas”. A su juicio, este año se acerca la “tormenta perfecta”: El nuevo Baremo de Autos costará al ramo 400 millones de euros por el aumento del 16% de las indemnizaciones y la adaptación a la directiva europea Solvencia II acarreará un gasto de 250 millones. Y, además, hay otros dos factores que van a jugar en contra. Por un lado, la gasolina va a seguir bajando, lo que se traducirá en un mayor uso del coche y, por tanto, en una mayor siniestralidad. Y por otro, los tipos de interés se encuentran en mínimos lo que afectará a los ingresos financieros: el 72% del beneficio bruto del sector procede de estos ingresos, el 33% en el caso de Línea Directa.

La decisión de la compañía de absorber todos estos impactos y no repercutirlo en la prima se traducirá en que en 2016 Línea Directa no espera crecer en beneficio sino simplemente mantenerlo. El consejero delegado explica que la política tarifaria afectará al margen, pero considera que serán capaces de mantener el del año pasado y mantener por tanto también el beneficio. Entre otras cosas, cree que se puede reducir el coste de los siniestros sin que ello afecte a la calidad del servicio.

En concreto, en 2016 la entidad espera crecer un 20% más en pólizas respecto a 2015 y superar los 2,5 millones en cartera; batir el récord histórico en facturación por primas, con un crecimiento superior al 6% y “mantener uno de los BAI más sobresalientes del sector”.

Los resultados de 2015

El pasado año Línea Directa obtuvo un beneficio bruto de 139 millones, un 4% más que en el ejercicio anterior. Según destaca su consejero delegado, el 26% de los beneficios del ramo de Autos son de Línea Directa, algo logrado con tan solo una cuota de mercado del 6%. También ha querido subrayar el dato del ROE, un 29,4%, el doble que el del sector.

El íncremento neto del número de pólizas fue de 143.500, un 9,5% más que el año anterior. El crecimiento de la cartera fue del 6,4% hasta los 2,37 millones, con alzas del 3,5% en Autos y 18% en Hogar. El 14% del crecimiento de esa cartera corresponde a las 2 nuevas marcas, Penélope y Nuez, que tienen 337.000 pólizas en cartera. La facturación por primas ascendió a 680 millones, con un avance del 4,5%: 70 millones correspondieron a Hogar, con un crecimiento del 20,5% respecto al ejercicio anterior; y 610 millones a Autos, con un ritmo de incremento del 2,8%.

Beneficiados por Solvencia II

La siniestralidad consolida su tendencia a la baja con un ratio del 66,4 frente al 67,5 de hace un año, colocándose en el caso de Autos por primera vez por debajo de 70, en el 69,9. El ratio combinado mejora desde el 86,5 hasta el 85,3: en Autos es del 86,6 frente al 99,9 del sector (dato a cierre del tercer trimestre) y en Hogar del 87,9 frente al 90,8 de la industria.

Respecto a la capitalización y solvencia, Línea Directa acabó 2015 con un ratio de solvencia del 204%. Pero si se tienen en cuenta las nuevas normas de Solvencia II que entraron en vigor en enero de 2016, ese ratio se incrementaría hasta el 222%, con un superávit respecto al mínimo exigido de 210,8 millones de euros.