La parte de Forinvest dedica al sector asegurador se inició con una mesa redonda, participada por CEOs de compañías de seguros y presidentes de asociaciones de la mediación, sobre los retos y las amenazas del sector en los próximos años. Joan Castells, presidente Ejecutivo de Fiatc, aseveró que la mediación sigue siendo fundamental y considera a estos profesionales “como el antídoto al cliente que compra por precio o que lo hace por presión”, en alusión a las prácticas de la bancaseguros. Sobre este particular indicó que “competencia lícita pero los medios que usa no lo son tanto”.

Retos mediación

El presidente del Consejo General, José María Campabadal, enumeró el marco legal estable, el mercado en busca de eficiencia, el cliente y los propios mediadores como los aspectos centrales del sector. Puntualizó sobre el asegurado que hay que profundizar en su conocimiento y trabajar en métodos predictivos que muestren el camino de cómo actuar. Francisco Rodríguez, presidente de Aemes, señaló que el sector de la mediación no se ha concentrado una vez que la parte fuerte de la crisis ha pasado. Indicó, en tono irónico, que si se descuida se termina la crisis y todavía son más. Sobre la tecnología consideró “que se está hablando demasiado tiempo de EIAC” e indicó que los avances son ‘políticos’ más que reales.

Finalmente, Tomás Rivera, presidente de Fecor, se refirió también al marco legislativo como uno de los retos. Indicó que la IDD viene con mínimos que ahora hay que transponer y negociar. Señaló que es difícil hacerlo en un momento político como el actual y que puede suponer que hasta octubre no se haga nada. Su segundo punto fue la era digital, pero resto importancia porque la mediación siempre ha sabido adaptarse. Citó que las bajas primas medias han ocasionado muchos problemas y señalo que un ratio de póliza de 1,4 por cliente es poco.

Función social del seguro

La secretaria general de Unespa, Mirenchu Del Valle, hizo hincapié en la importancia de saber comunicar lo que hace el seguro por la sociedad. Incidió en que el sector tiene necesidad de defender la notoriedad que posee. Es un sector que supone el 5,3% del PIB español. Indicó que “hay que poner en valor los 50 millones de problemas que resuelve al año”. Comparó esta cifra con las 6.000 reclamaciones que recibe la DGSFP, de las que la mitad son favorables para las compañías. Dejó claro que 3.000 fallos de 50 millones gestionados son números “para estar satisfechos”.