En los nueve primeros meses del año las pérdidas en Europa por catástrofes naturales alcanzaron los 17.000 millones de euros, de los que el 75% se debieron a daños causados por inundaciones. Los datos pertenecen a Munich Re, que incide en su llamamiento para que los Gobiernos y las aseguradoras incrementen su trabajo y labor de prevención mediante estrategias para luchar contra esos riesgos.

Ludger Arnoldussen, miembro del Consejo de Dirección de Munich Re, en su intervención en el encuentro de reaseguro de Baden-Baden ha insistido en la urgencia de adaptación a ese tipo de eventos catastróficos, y recuerda que “los estudios demuestran claramente que tiene mucho más sentido económico para las economías invertir en la prevención desde el principio y así evitar las pérdidas”. Pero desde el punto de vista humanitario, subraya que las medidas preventivas son una necesidad.

Por otro lado, Arnoldussen se muestra confiado de cara al próximo proceso de renovaciones de contratos y confía en que se mantengan “bastante estables” los precios para las compañías de su cartera.