La Audiencia Provincial de Jaén, con el magistrado Rafael Morales como ponente, ha dictado una sentencia que abre la puerta a que las víctimas de accidentes de tráfico con lesiones graves sean indemnizadas de por vida. El fallo ha impuesto a Mutua Madrileña la obligación de satisfacer a la víctima una pensión de 4.000 euros mensuales(revalorizables anualmente según el IPC), además de una indemnización de 1.031.801,87 euros. En junio de 2005, una niña que entonces contaba con tan sólo 2 años de edad quedó tetrapléjica con motivo de un accidente de tráfico. Según explica a El Mundo el abogado Marcial Polo Rodríguez, que ha defendido los intereses de la menor, la sentencia es pionera porque se acoge a la posibilidad, prevista en la ley que regula las indemnizaciones por accidentes de tráfico, de sustituir una parte de la indemnización que le podría corresponder a la víctima por una renta vitalicia.