La opinión de los empleados, clave en el futuro de Agrupació y Aliança

La responsable de la DGSFP, Flavia Rodríguez Ponga, lo dijo bien claro recientemente: “La DGSFP sólo tiene que velar porque la venta de Agrupació Mútua sea transparente, pero las decisiones corporativas corresponden a la Asamblea de Mutualistas”. Y otro tanto podría pasar en el caso de Aliança, intervenida por la Generalitat de Cataluña. Por tanto, las Asambleas de ambas entidades serán puntos de inflexión importantes a la hora de decidir su futuro, pero ¿quién va a una Asamblea de una mutua o de una mutualidad?

La experiencia nos muestra que la presencia de mutualistas es francamente escasa, incluso si tenemos en cuenta las delegaciones de voto, pero hay un colectivo que suele participar muy activamente en las Asambleas mutuales: Los empleados. Si tenemos en cuenta que en los casos de Agrupació y Aliança, además se están jugando su puesto de trabajo, es de prever una masiva asistencia de empleados a las reuniones que decidirán el futuro de ambas entidades. De ahí que los pretendientes hayan cortejado muy especialmente a sus Comités de Empresa, como les contamos en el caso de Agrupació, prometiendo que se respetará el empleo tras la venta de la entidad.

Otro aspecto que está jugando en ambos procesos a favor de Fiatc es el carácter mutual de las entidades en venta, ya que su adquisición por sociedades anónimas determinaría una previa desmutualización, un proceso al que, de nuevo, los mutualistas podrían poner objeciones.

En cuanto a la influencia de que se busque una “solución catalana” en estos procesos, Iñaki Ereño, consejero delegado de Sanitas, entidad que ha participado en la puja por Agrupació y Aliança, recientemente negó un impacto significativo de este factor.