Pilar González de Frutos subraya que el sector asegurador, “más que solvente, es sobresolvente”

La presidenta de Unespa, Pilar González de Frutos, considera que el sector asegurador tiene la estructura de prestación de servicios más extensa y eficiente de la economía española. Parte del hecho de que el “centro de nuestra labor son esos más de 50 millones de gastos, que a veces se llaman siniestros, yo prefiero llamar problemas con los que los clientes vienen y nosotros les resolvemos”. Esa alta eficiencia se refrenda en que “esos 50 millones de problemas son 50 millones de oportunidades de hacerlo bien o no hacerlo tan bien. Pese a ese volumen tan importante de oportunidades de que las cosas no salgan perfectas, solo tenemos 9.000 reclamaciones al año, según los datos de la DGSFP”. González de Frutos precisa que “alguien que hace todo esto tiene que ser un proveedor de confianza”, y esa garantía se llama margen de solvencia y está meticulosamente regulada por la ley. “Todo lo que se puede decir del seguro español es que más que solvente, es sobresolvente, porque tenemos tres veces más de patrimonio propio dedicado a cumplir el requerimiento legal de solvencia”.

Tras la celebración de la Asamblea de la asociación, Pilar González de Frutos presentó a todo el sector la Memoria Social de 2014, este año con especial atención a la reforma del Baremo. Afirmó que “somos una pieza social. De que nosotros hagamos bien las cosas depende una parte relevante del bienestar de millones de personas”. En esa línea puntualizó que “creo firmemente que la reforma del Baremo que actualmente está en el Parlamento es un proyecto normativo muy social, probablemente el más social que se ha abordado en mucho tiempo”. Eso se debe a que “no hay nada más social que la certeza, que alguien que necesita algo tenga la certitud de que lo recibirá y pueda conocer con precisión las reglas del juego. Esto es lo más social que hay. El Baremo cumple esa condición”.

Para la presidenta de Unespa, el sistema de valoración es además justo y equitativo, “la pregunta de cuánto vale la vida tiene millones de respuestas distintas. Lo importante ante realidades así no es colmarlas, porque eso es imposible, lo importante es dar una respuesta equilibrada, que no se deje personas por el camino y que las trate con justicia”.

Otra gran característica de lo social es la capacidad de evolución, porque las sociedades evolucionan y lo social debe evolucionar con ellas. “Este Baremo lo hace, y en medio de un consenso total. En la reforma del Baremo hemos estado de acuerdo los aseguradores, las asociaciones de víctimas, los profesionales del derecho… es un proyecto de todos y para todos. No hay mayor expresión de una mayoría social que un proyecto de norma que llega hasta las manos del Legislativo habiendo sido validado por todas las partes implicadas”.

Finalizó expresando que “hemos hecho nuestra parte y estamos razonablemente orgullosos. Este orgullo es el que mueve y anima”.