El poder de los corredores brasileños llega directamente hasta el Gobierno

Los corredores de seguros brasileños tienen cada vez más alcance en sus propuestas y en sus reclamaciones. Se puede entender como un poder creciente: el vicepresidente del Gobierno de Brasil, Michel Temer, ha recibido a una delegación de los corredores agrupados en Fenacor, la Federación Nacional, y ha accedido a atender sus reivindicaciones. Y también a elevar sus peticiones a la presidenta de la República, Dilma Rousseff.

Los corredores, encabezados por su presidente, Robert Bittar, han planteado sobre bases técnicas al vicepresidente que en la iniciativa de tributación denominada Supersimples (Simples Nacional) se encuadre a estos profesionales en otra categoría. Se trata del régimen de tributación simplificado para las micro y pequeñas empresas, pero el problema es que a los corredores se les había encuadrado en tabla 6, la de mayor valor. Si el poder de los corredores surte efecto, serán rebajados a la tabla 3, por la que tendrían que tributar mucho menos.


Fenacor ha dejado claro que si quedaban encuadrados en la tabla de mayor tributación continuarían bajo “una gran injusticia, en un bullying fiscal y tributario injustificable”. No tienen duda: creen que Dilma Rousseff hará justicia.