Adicae considera que para que los Planes de ahorro privado no sean un producto "privilegiado", la normativa debe "exigir" eficacia en los resultados, además de unas comisiones "justas" y "limitadas razonablemente" a la obtención de beneficios. También insta al Gobierno y a los sindicatos a que abran un debate sobre estos productos para que la reforma de las pensiones públicas no acabe produciendo beneficios "exclusivamente" y "una vez más" a las entidades financieras. Según Adicae, la reforma de las pensiones "no será completa" si no se aborda conjuntamente la del sistema privado, un sistema "ineficiente" y "maltratado históricamente" en España.

Por otro lado, Citi ve con buenos ojos la reforma de las pensiones que ha aprobado el Gobierno, pero señala que "se queda a medio camino" para que el sistema público pueda hacer frente al envejecimiento de la población. El aumento de la edad legal de jubilación de los 65 años a los 67 supone un "paso digno de elogio y políticamente difícil", si bien considera la transición de un sistema a otro de un proceso "excesivamente largo", ya que la presión sobre el gasto en pensiones comenzará esta década, añadiendo un 1,5 puntos porcentuales al déficit estructural hasta 2020. Además, cree que las condiciones para retirarse a los 65 años de 38,5 años de cotización “no son tan duras como se había dicho inicialmente (41 años), lo que podría diluir el efecto del retraso".

Por su parte, el secretario general de CCOO, Ignacio Fernández Toxo, declara a Público que con la reforma se benefician “todas las personas que van a cobrar una pensión en los próximos 30 años y a futuro porque se consolida el sistema para los próximos 40 años o 50 años”. “Es cierto que carreras largas ascendentes van a tener una menor expectativa de pensión en un límite pequeño y, sin embargo, gente que al final de su carrera se ha visto expulsada del mercado de trabajo, despedida, al contabilizarle más años para calcular la pensión puede experimentar una mejora muy importante”, añade.