Aemes ha participado en una reunión para evaluar el sistema de formación para el empleo, organizada por el Grupo de Trabajo de Entidades Beneficiarias de subvenciones en materia de formación, correspondientes a las convocatorias de 2010 y 2011. Analizaron las consecuencias de la reducción en las partidas prespuestarias para los planes de formación, que han derivado en un menor acceso de los trabajadores y la disminución de la calidad de la oferta formativa. Mientras, el contexto socioeconómico actual propició la propuesta de atribuir un presupuesto específico para la formación de desempleados, “en lugar de detraer estas partidas de los fondos de formación para trabajadores ocupados, con el fin de atender las necesidades de recualificación del colectivo de desempleados de larga duración”, resume.

También se resaltó la relevancia del sistema de la teleformación en sustitución de la formación a distancia, lo que requiere una formación de acceso que permita un uso eficiente de sus plataformas. Además, el tutor adquiere valor de calidad en el modelo.

Para el Grupo de Trabajo, el modelo de formación es adecuado pero no sus procedimientos de gestión, “aludiendo a los crecientes problemas de interacción entre la Fundación Tripartita y el Servicio Público de Empleo Estatal a la hora de ejecutar estos planes de formación. Ello ha propiciado un aumento de las cargas administrativas a las entidades beneficiarias en funciones que, a priori, no deberían ser de su competencia”.