AIG inicia el camino para que el Tesoro venda su participación en la entidad

El presidente y CEO de AIG, Robert Benmosche, ha enviado una carta a los empleados del grupo en la que aprovecha para expresar su felicitación por la consecución de "excelentes" resultados en el primer trimestre del año y por el hecho de haber realizado la amortización no dineraria con cargo a beneficios correspondiente a la extinción de la línea de crédito que en su día le facilitó el Banco de la Reserva Federal de Nueva York. "Y considero excepcional poder anunciar que hemos devuelto este crédito con dos años de adelanto y que hemos iniciado el camino para que el Departamento del Tesoro de Estados Unidos venda en los mercados bursátiles su participación en AIG a lo largo del tiempo, en función de las condiciones de mercado. Se trata de un hecho extraordinario de cuya consecución podemos sentirnos orgullosos", enfatiza.

El directivo valora de forma muy positiva los ingresos de explotación netos de 2.000 millones de dólares, especialmente por el contexto de pérdidas derivadas de las últimas catástrofes por el terremoto y tsunami de Japón, el terremoto de Nueva Zelanda y las inundaciones de Australia. Precisamente agrade el apoyo de los empleados para ayudar a la reconstrucción en Japón y la recaudación de 650.000 dólares para ese fin, cantidad que igualará el grupo. Considera que "hemos demostrado la fortaleza y solidez de nuestras operaciones, así como nuestra concentración en aspectos fundamentales como la creación de productos y servicios innovadores, todo lo cual ha servido para constatar la capacidad de generación de ingresos de nuestra franquicia mundial". Entre otros datos, Benmosche indica que en el caso de Chartis los resultados del primer trimestre se vieron afectados por las pérdidas derivadas de las catástrofes, aunque aumentaron las primas netas generales, conservó sus clientes y los precios se mantuvieron estables.

Por último afirma que "nuestros resultados de este trimestre, si bien han sido positivos, sirven para recalcar el trabajo que aún nos queda por hacer, puesto que nuestro objetivo es lograr que AIG sea la aseguradora más valiosa del mundo. Todos nuestros esfuerzos deben concentrarse en crear valor, desarrollando mejores productos para los clientes, invirtiendo en tecnología que nos haga más ágiles y eficientes, y gestionando bien cada céntimo que debamos gastar. Todos nosotros podemos aportar valor a esta empresa, y todos sabéis que su principal valor reside en vosotros, en nuestra gente".