AIG ha reportado unas pérdidas netas de 1.700 millones de euros en el tercer trimestre del año frente a los beneficios de 462 millones logrados en el mismo periodo de 2016. La aseguradora explica que "en el tercer trimestre la industria aseguradora ha sufrido eventos catastróficos sin precedentes. La capacidad de adaptación frente a estos eventos refleja la fortaleza de nuestro balance y de la posición de capital. Estoy muy orgulloso de nuestra respuesta y del compromiso con nuestros clientes, así como de la asistencia que nuestros colegas han provisto a los más afectados por estas catástrofes", ha afirmado Brian Duperreault, presidente y CEO del grupo.