Si los riesgos para las aseguradoras se comparan con los de la medición de julio, la conclusión es que se han reducido pero que no se puede bajar la guardia y que persiste la preocupación en el sector. En la actualización de su panel de riesgos basado en datos actualizados sobre Solvencia II, Eiopa confirma que las entidades "están particularmente expuestas a niveles muy altos de macro riesgo, mientras que los riesgos de mercado, crédito, rentabilidad y solvencia disminuyeron a un nivel medio". El problema es que en esa evaluación no se tiene en cuenta el brote de la segunda ola de la pandemia.

Eiopa alerta sobre el riesgo macroeconómico, las previsiones de crecimiento del PIB y la recuperación y la tasa de desempleo, aunque alude también la estabilización de los mercados financieros a finales del tercer trimestre. Aunque apunta que los riesgos para el seguro se mantienen en un nivel medio "impulsados ​​por la preocupación general por la disminución del crecimiento de las primas y, en algunos Estados miembros, por la adecuación de las reservas". En concreto, el crecimiento interanual de las primas de Vida registró un deterioro significativo por segundo trimestre consecutivo, lo que ya indica un impacto negativo del brote de Covid-19.

Señala que a pesar de que la percepción del mercado muestra una tendencia a la baja, los riesgos persisten en un nivel medio. En todo caso Eiopa recuerda que se trata de indicadores que no incluye todo el impacto de la segunda ola.