Apcas ha celebrado su asamblea general de forma virtual. Su presidente, Fernando Muñoz, se ha mostrado "orgulloso de cómo han afrontado el confinamiento y los meses de pandemia" y asegura que sale "reforzada". En su informe mencionó que entre marzo y junio la organización ha emitido más de un centenar de comunicaciones para informar a los socios y potenciar los cursos online a través de Ceaps.

Destacó el presidente el papel que está teniendo la videoperitación y subraya el "buque insignia" de la asociación como es el XT50 y que ha servido para tramitar 130.000 expedientes en 2019 y que espera que alcance los 180.000 antes del cierre del año. Mencionó que otros de los proyectos encima de la mesa es la posibilidad de hacer informes a medida por medio de Apcas Data, así como el inicio del estándar de comunicación EIAP entre aseguradoras y los gabinetes periciales, un "antes y después en nuestra vida digital", en su opinión.

Trabajos pendientes

Dos son los trabajos pendientes que tiene la organización, según ha manifestado Muñoz. Por un lado, la certificación profesional que debido a la pandemia sea ralentizado, pero que el presidente afirma que "no nos rendimos y saldrá adelante". Considera este paso como "un pilar importantísimo para la asociación a la que queremos llegar".

La segunda tarea es la elaboración de unos nuevos estatutos que previsiblemente serán aprobados en la asamblea extraordinaria que tendrá lugar el 28 de noviembre. Una actualización que hará de Apcas "una asociación menos presidencialista, más abierta y menos alejada de términos como incompatibilidad o intrusismo", explica Fernando Muñoz.

Finalmente, indicó que la celebración del congreso cuatrienal se ha aplazado a octubre de 2021 y asegura que servirá "para poner de manifiesto que se abre la era del perito". Asegura el presidente que en la próxima década "asistiremos a una profesión moderna, con profesionales digitalizados, bien formados y certificados que participarán en el mercado del seguro y en otros muchos mercados".