Las aseguradoras, entre los principales inversores de la última emisión de deuda pública

El Tesoro Público ha efectuado su primera emisión sindicada de un bono a 20 años por importe de 12.000 millones de euros y se han superado todas las expectativas, con una demanda por encima de los 78.300 millones de euros. Esta emisión se enmarca en el nuevo programa de financiación revisado en mayo para hacer frente a las mayores necesidades de financiación derivadas de la pandemia del Covid-19.

La demanda ha estado repartida entre 460 cuentas inversoras, muy diversificadas tanto desde el punto de vista geográfico como por tipología de inversor. Y el seguro ha estado muy bien representado. La mayor participación ha correspondido a las gestoras de fondos, con un 33,8%, y el podio lo completan las tesorerías bancarias (27,7% del total) y las aseguradoras y Fondos de Pensiones (18,1%). Por detrás están otros servicios bancarios (8,5%), los fondos apalancados (6,1%) y los bancos centrales e instituciones oficiales (2,4%). Otros inversores han representado un 3,4%. 

La participación de inversores no residentes ha sido muy significativa, alcanzando el 83,3% de la sindicación. De este porcentaje, un 25% corresponde a Francia e Italia; un 18,8%, a Reino Unido e Irlanda; y un 16,8%, a Alemania, Austria y Suiza. El resto se reparte entre otros inversores europeos, Estados Unidos, Canadá y Asia.

La rentabilidad de la emisión se ha situado en 1,251%, inferior en más de 5 puntos a la de la emisión a 10 años realizada el pasado mes de abril y equivalente a 28 puntos básicos por encima de la referencia del Tesoro a 15 años. El bono emitido vence el 31 de octubre de 2040 y tiene un cupón del 1,20%. Con esta sindicación de 12.000 millones de euros, el Tesoro lleva cumplido un 67,3% del objetivo anual de emisión a medio y largo plazo que revisó el 21 de mayo de 2020 (185.969 millones de euros).