El beneficio neto de Pelayo Mutua en los seis primeros meses del año ascendió a 6,15 millones de euros, el 7,1% más que en la primera mitad de 2010. Atribuye ese resultado a las medidas adoptadas en cuanto a control de costes y disminución de la siniestralidad. La mutua cerró el ejercicio con una facturación de 240,5 millones de euros, el 1,03% menos que un año atrás, debido al esfuerzo de la entidad "en la retención de clientes y la caída de la prima media en Autos, consecuencia de la reducción de garantías y la contratación de modalidades más básicas del seguro", explica.

En cuanto a Grupo Pelayo su facturación aumentó un 0,63%, hasta los 261,7 millones de euros, con un beneficio de 6,5 millones (+11,8%). Por su parte, el ahorro gestionado en Vida a través de Pelayo Mondiale Vida se situó en 164,8 millones de euros (+10,9%); su facturación fue de 21,2 millones de euros (+24,3%).

La mutua reafirma sobre su estrategia para este ejercicio que pasa "adaptarse a la difícil situación del mercado, centrando las prioridades en mantener y fidelizar la cartera de clientes y gestionar con mayor eficiencia de costes y gastos. El objetivo último de la mutua sigue siendo posicionarnos como líderes en calidad percibida dentro del sector asegurador".