Blesa quiso vender sucursales de Caja Madrid al Plan de Pensiones de los empleados

Caja Madrid, presidida por Miguel Blesa, propuso en octubre de 2009 la venta de sucursales al propio Plan de Pensiones de los empleados, para resolver “tensiones fuertes de liquidez de la entidad”, según UGT. Eran 158 locales, por 165 millones de euros, que se alquilarían a la caja durante 25 años con una rentabilidad del 6%, según publica vozpopuli.com. Sólo los 2 representantes de UGT en la Comisión de Control (16 integrantes) se opusieron porque la operación suponía casi el 25% del patrimonio del fondo, lo que suponía una enorme concentración de riesgos, los precios del sector inmobiliario apuntaban claramente a la baja, el plazo era excesivo, no había garantía de recompra, y porque el Plan de Pensiones ya tenía posiciones en inmuebles. Y porque era “un préstamo hipotecario de los empleados a la entidad”. La DGSFP puso reparos a la operación, que finalmente no se hizo.