Conservar la cartera de clientes, “la máxima prioridad”, y al mismo tiempo incrementar la solvencia y el patrimonio, son los ejes estratégicos de Pelayo este año, explicó su presidente, José Boada, en la asamblea de mutualistas. Boada habló de “malas previsiones” para las matriculaciones de vehículos, con cifras que pueden ser peores que las de 2012, y de que seguirá la reducción de los precios de los seguros de Autos ante la fuerte competencia.

Esa reducción de precios explica el descenso del 10% del volumen de negocio de la mutua (419 millones, que asciende a 440 millones en todo el grupo). El buen comportamiento de la siniestralidad, que mejora 1,3 puntos en Autos (70,6%), el esfuerzo en costes, pese a la subida del IVA bajan el 2,3%, y el ratio combinado, que mejora 1 punto (98,2%), hacen que este descenso en facturación se traduzca en un alza del 1,3% en el beneficio, hasta los 10,4 millones. La asamblea aprobó destinar el beneficio a fondos propios, que ascienden a 314 millones, con un superávit del 333% en el margen de solvencia (255 millones).