La caída de los precios de las primas en el seguro de D&O es insostenible

El ciclo de mercado blando en el seguro de D&O debería acabar ya porque las primas actuales no se pueden mantener mucho en el tiempo por la insostenibilidad técnica y por el aumento de la siniestralidad, sobre todo por el incremento de los costes de defensa jurídica. Esta es una de las conclusiones que José María Elguero, subdirector de Marsh, ha puesto de manifiesto durante la presentación del ‘IV Estudio Marsh: El seguro de D&O en España’. No obstante, Elguero considera que, a pesar de que hay siniestros importantes, estos no son tan frecuentes como para que no se pueda permitir un mercado blando, al menos en lo que queda de año. Y si finalmente el ciclo se acaba, afirma que esto no supondrá necesariamente un aumento de las primas, sino una estabilización con pequeños repuntes.

La siniestralidad se ha incrementado de media un 12%, pasando de un promedio del 26,3 en 2009 al 29,5 en 2010: Los incidentes (notificación por parte del asegurado de cualquier hecho o circunstancia que a su juicio podría dar lugar a una futura reclamación) han crecido en un 20%. El 87% de los pagos realizados por las aseguradoras correspondieron a defensa jurídica, con un aumento respecto al año anterior. Por este motivo, según explica Elguero, “la previsible inclusión de cobertura jurídica para personas jurídicas no es bien visto en el sector asegurador”. Respecto a la procedencia de las reclamaciones, el 41,5% procede de los accionistas y el 37,5% de los empleados.

Gestionando los precios

Del informe se desprenden otros datos importantes sobre el desarrollo del seguro de D&O en España. En 2010, no entraron nuevos jugadores en el mercado y debido a las primas tan bajas los operadores que existen han comenzado a poner cierto límite a sus capacidades y a aplicar políticas de ‘capacity management’ para gestionar de forma más eficiente la capacidad y su coste. La capacidad general del seguro de D&O entre todos los operadores es de 455 millones, “por lo que dispone de capacidad suficiente para asegurar los riesgos actuales y futuros, así como para permitir incrementos de límites asegurados en los actuales programas, si bien el precio de estas capacidades no será, posiblemente, tan barato como hasta ahora”.

Respecto al tipo de cliente, también se han producido cambios importantes. Se han incorporado las Pymes, destacando las empresas familiares, y otro tipo de grupos como las entidades sin ánimo de lucro, asociaciones o sociedades y colegios profesionales, o firmas jurídicas. Especialmente relevante ha sido el crecimiento del 20% de la contratación de estos seguros por parte de las empresas municipales y sociedades estatales. Gracias a estos nuevos clientes el número de pólizas D&O creció en 2010 un 30,1%; las empresas invirtieron en total casi 120 millones de euros en proteger a sus directivos.

Según los datos de ICEA, en 2010 las primas del seguro de No Vida sumaban 31.820 millones de euros, con una ligera alza del 0,21%. De esa cantidad, 1.623 millones correspondieron a RC, con una reducción del 5,16%, mientras que las primas del seguro D&O ascendieron a 119 millones, con un incremento del 3,97%. En estos momentos, por tanto, este tipo de pólizas representan tan sólo un 7,33% de las primas de RC, un dato que, según el subdirector de Marsh, permite augurar en un futuro un desarrollo importante.