En el mes de mayo han sido los Planes de Pensiones de renta fija de largo plazo los que han experimentado una mayor rentabilidad con un 1,42%. Los de renta fija a corto y medio plazo han sufrido pérdidas, pero mucho menores que las sufridas por los de renta variable que en meses anteriores experimentaban rentabilidades positivas (4,6e% en abril). 

La principal razón del cambio de tendencia es que la volatilidad y la aversión al riesgo han estado presentes en los mercados financieros durante el mes de mayo, llevando a los principales índices bursátiles a cerrar el período con importantes correcciones, y al mismo tiempo, incrementar la demanda de activos considerados refugio, como la deuda pública, cuyas referencias más importantes, como el bono español a 10 años, alcanzan mínimos históricos de TIR. Así, las categorías con mayor exposición a renta fija de larga duración registran rentabilidades interanuales positivas, frente a las ligeras correcciones del resto de categorías según señala Inverco.

En el largo plazo, los Planes de Pensiones del Sistema Individual registran una rentabilidad media anual (neta de gastos y comisiones) del 3,48% y, en el medio plazo (5 y 10 años), presentan una rentabilidad del 1,34% y del 3,11%, respectivamente.

En cuanto al  volumen estimado de aportaciones y prestaciones brutas en mayo alcanzaron los de 204,4 millones de euros y prestaciones brutas de 203,0 millones de euros respectivamente, con lo que el volumen de aportaciones netas del mes alcanzaría los 1,4 millones de euros.