Cesce recibe seis sellos de la Oficina Española de Cambio Climático

La Oficina Española de Cambio Climático (OECC) ha concedido a Cesce el sello 'Calculo, Reduzco y Compenso 2019' y ha inscrito a la compañía en el 'Registro de huella de carbono, compensación y proyectos de absorción de CO2 del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico'. Con este registro, la aseguradora avanza en su propósito de alcanzar el objetivo 'Cesce Emisiones Cero', en el marco de su estrategia de RSC.

El sello se obtiene calculando, reduciendo y compensando las emisiones que genera una organización, cuya huella de carbono se define a partir del cálculo de los gases de efecto invernadero (emisiones de CO2 o de CO2 equivalentes), en relación con los consumos asociados a su actividad diaria.

Siguiendo la metodología de la OECC, las mediciones de Cesce se han centrado en el uso de las calderas y vehículos propiedad de la empresa (alcance 1) y en la electricidad adquirida y consumida (alcance 2) desde 2016 hasta 2019.

En primer lugar, estas mediciones han llevado a la obtención del certificado 'Calculo' (años 2016, 2017, 2018 y 2019), paso previo para acceder al resto de certificaciones. A continuación, la aseguradora ha obtenido el sello 'Reduzco' (año 2019) ya que el cálculo de sus emisiones ha verificado una reducción efectiva entre 2017 y 2019, desde las 438,06 toneladas de CO2 registradas en 2016 hasta las 223,5 toneladas de CO2 generadas en 2019. Esta reducción es el resultado de varias medidas internas implementadas a lo largo de estos años, como el uso de electricidad procedente de energías renovables, incluyendo los paneles solares instalados en 2020 en la cubierta de su sede principal o la progresiva sustitución de los vehículos de la compañía por vehículos híbridos.

Y el último sello que ha obtenido Cesce es el 'Compenso' (año 2019), que acredita que la compañía está trabajando para compensar la huella de CO2 generada. En este caso, Cesce se ha sumado a un proyecto de absorción de dióxido de carbono a través de la siembra y plantación de especies en los bosques de Ejulve, en Teruel, para compensar el equivalente a la emisión de 225 toneladas de CO2.