En España la relación con las finanzas se produce a edades muy tempranas y es algo cotidiano. Así lo considera un estudio realizado por Metlife en colaboración con la Fundación Junior Archievement, que cifra esta relación a partir de los 6 años cuando los pequeños comienzan a ahorrar.

El informe muestra también que las chicas demuestran un nivel de conocimiento financiero básico superior al de los chicos hasta los 15 años. Ellas son más racionales en los procesos de compra y dedican más tiempo a comparar productos similares, además de buscar mejores ofertas y valorar entre ingresos y gastos al tomar decisiones.

Sin embargo, los niños asumen en España más responsabilidades en la gestión de la economía familiar antes que las niñas. Aun así, la edad media a la que los jóvenes acceden a medios de pago como tarjetas o crédito es casi un año y medio inferior que los chicos.