La pandemia está pasando factura a las grandes aseguradoras internacionales. Una de ellas es AIG que, al cierre del primer semestre de 2020, ha visto cómo los ingresos por primas han descendido drásticamente en comparación con el ejercicio anterior. En No Vida, la recaudación ha caído un 29% sólo en Norteamérica y un 2% en el resto de países en los que opera. Y en Vida, los ingresos han registrado una caída de 168 millones de dólares por las pérdidas de capital privado, la continua compresión del margen y la elevada mortalidad relacionada con la Covid-19. También se ha disparado casi 12 puntos su ratio combinado, situándose en el 106%, debido a las pérdidas que ha ocasionado el coronavirus, los disturbios sociales en EE.UU. y las catástrofes naturales.

Allianz también ha sufrido los embates de la pandemia. Su resultado neto atribuible a los accionistas disminuyó un 28,6% en el segundo trimestre y los ingresos totales cayeron un 6,8%. No Vida creció un 0,3%, pero Vida y Salud decreció un 12,6%. Su ratio combinado empeoró ligeramente y se sitúa en el 95,5%.

Munich Re ha tenido una trayectoria similar. En el segundo trimestre, ha generado un beneficio de 579 millones de euros, casi la mitad que en el mismo periodo del ejercicio anterior. Sumado al primer trimestre, acumula un beneficio de 800 millones de euros, exactamente la mitad que hace un año, cuando ascendía a 1.626 millones. En los 6 primeros meses de 2020, la compañía alemana ha registrado unas pérdidas de 1.500 millones a causa del Covid-19, la mayoría atribuidas al reaseguro de Daños. El lado positivo es que su volumen de primas ha aumentado un 7,7% en el primer semestre, hasta los 27.112 millones de euros.