Los daños por agua han sido los siniestros más habituales en los hogares españoles este verano, según el análisis de las intervenciones realizadas por RACC Servihogar 24h. La mayor parte de los siniestros (44,3%) estuvieron relacionados con filtraciones y escapes derivados de instalaciones fijas (tuberías de alimentación o desagües, atascos, etc..). El RACC agrega que los incidentes originados por fenómenos meteorológicos han ocupado el segundo lugar este verano y representan el 13,3% de la actividad. En esta época, la mayor parte de siniestros con origen en daños eléctricos tiene relación con subidas y bajadas de tensión o caídas de rayos.

Pese a todo, el peso de este tipo de siniestros ha sido menor que en 2020, ya que, según datos de Aemet, este verano ha sido más caluroso y seco que el anterior, cuando se registraron fuertes lluvias y tormentas.

Con el 10,4% de los expedientes, la rotura de cristales es la siguiente problemática más habitual, aunque representa una caída del 7% respecto a 2020. Por último destacan los daños por robos con el 6,3% del total, una cifra ligeramente superior a la registrada en 2020 (5,8%).