Dejar de ser agente exclusivo: Un problema muy real, aumentado por la crisis

La redacción de Carta del Mediador se ha visto sorprendida esta semana con los numerosos agentes y ex-agentes exclusivos que se han dirigido a esta redacción para exponer sus dificultades al querer cambiar de figura jurídica de mediador, tras la publicación la semana pasada de la noticia La importancia de reflejar la indemnización por clientela en los contratos de agencia. Ante las numerosas peticiones de estos mediadores que cuentan sus problemas para cambiar a corredores o agentes vinculados, debemos comunicar que la política informativa de esta redacción contempla la no difusión de casos particulares de enfrentamientos entre mediadores y entidades, a no ser que tengan una relevancia sectorial, y en cualquier caso, se publicaría siempre tras contrastar las noticias con la entidad correspondiente.

No obstante, si nos gustaría dejar constancia hoy de la existencia de un problema real para los agentes exclusivos, que pueden llegar a perder la totalidad de su cartera de décadas, si fracasa la negociación con su entidad para cambiarse de figura. Es notorio que la crisis ha incrementado estos problemas y se detecta una mayor inflexibilidad de las compañías a la hora de negociar, argumentado la gran inversión que realizan en la formación, desarrollo comercial y apoyo económico de sus redes agenciales.

En este sentido, constatar que siguen creciendo los códigos de agente, en concreto, un 0,92% en 2012, según ICEA; continuando con la tendencia de que una minoría consigue la mayor parte del negocio. Así, el 89,5% de los agentes intermedió menos de 300.000 euros el año pasado y el 80,5%, menos de 150.000 euros; mientras que el 11,5% de los que facturan más de 300.000 euros son los que copan casi el 70% de las primas del total del canal, con una media de intermediación de 771.382 euros.