Por disposición del Gobierno de Venezuela, el tipo oficial de cambio pasa de 4,3 bolívares a 6,3 bolívares por dólar, una devaluación casi del 32%. También se ha aprobado la eliminación del Sistema de Transacciones en Moneda Extranjera, el último de los mecanismos implementados para hacer operativo el severo régimen de control de cambios de divisas que impuso desde 2002. Desde 1998, año en que Hugo Chávez ganó su 1ª elección, la moneda venezolana acumula una devaluación del 17% de media anual, según El País. La medida afecta, entre otras empresas españolas presentes en Venezuela como Sanitas, a Mapfre, que ingresó allí unas primas de 818,7 millones de euros en 2012, con un crecimiento del 27,9%. Sus resultados en Venezuela se duplicaron hasta 45,4 millones de euros.