Hasta el 80% de las mujeres estadounidenses de entre 50 y 65 años cuentan con un seguro de Vida. Una de sus principales preocupaciones es que, en caso de ellas fallezcan, sus hijos puedan disponer del dinero suficiente. Según un estudio de MetLife, el seguro de Vida se convierte en uno de los productos más frecuentes, contratado a través de su trabajo o por su propia cuenta. El porcentaje es del 70% en mujeres de entre 35 y 45 años, y del 56% en las más jóvenes. Por su lado, el motivo por el que algunas mujeres no disponen de un seguro de Vida es porque sienten que no lo necesitan por la seguridad financiera de todos los beneficiarios (40- 50%), o no están seguras de necesitarlo, como sucede con las generaciones más jóvenes.

Patricia Jiménez, responsable de Marketing & Comunicación de MetLife Iberia, subraya que "esta investigación pone en relieve que para las mujeres de todas las generaciones el bienestar emocional y financiero de sus familias es una prioridad a pesar de que puedan tener enfoques particulares. Desde MetLife, trabajamos para ofrecer las mejores coberturas en nuestros seguros de vida para contribuir a la estabilidad de nuestros asegurados".