La facturación de Pelayo ha sufrido un descenso del 0,6% en el primer trimestre del año frente al mismo periodo de 2013, situándose en 93,6 millones de euros. Esta caída se debe fundamentalmente, según explica la compañía, a la disminución de la prima media en Autos, consecuencia de la bajada de tarifas y la contratación de garantías más básicas del seguro: en Autos, el descenso ha sido de un 1,5% y en Hogar el crecimiento fue de un 4,8%. La cartera de pólizas de Autos se ha incrementado un 0,8% y la de Hogar un 10,5%. El número de clientes ha crecido en este primer trimestre en casi 14.000.

Respecto al resultado, ha alcanzado los 1,9 millones frente a los 2,7 millones del año anterior, lo que supone un descenso del 29,79%. La siniestralidad se ha situado en el 67,3%, ligeramente superior a la de la misma fecha del pasado año, debido, según la entidad, sobre todo a la menor utilización del vehículo en los desplazamientos por carretera y a la selección de riesgos practicada por la entidad. La solvencia ha alcanzado este primer trimestre 328,7 millones, que supone 4,8 veces el mínimo exigido.

La compañía explica en un comunicado que “la estrategia de la mutua sigue adaptándose a las condiciones del mercado y a la situación económica, marcando como objetivos prioritarios: la fidelización de la cartera de clientes, la correcta selección de riesgos y la gestión con una mayor eficiencia de gastos, que permita obtener un adecuado margen de negocio. Todo ello con la premisa de la calidad de servicio como factor diferenciador”.