El Fiscal coordinador de Seguridad Vial, Bartolomé Vargas, ha declarado la guerra al teléfono móvil al volante. Ha dado orden a los policías de tráfico para que investiguen la utilización del teléfono móvil en relación a los accidentes de tráfico, así como las llamadas que se hayan realizado previas al siniestro.

Quiere acabar así con datos como las 600 muertes que se produjeron el año pasado en nuestras carreteras por salidas de vías y que en buena parte se cree que tuvieron como causa el uso del móvil.

Vargas ha anunciado esta medida en una rueda de prensa para informar sobre los datos de siniestralidad vial. Indicó que los delitos de este tipo ascendieron en 2017 a los 81.951, el 32% de las sentencias dictadas.

El quinteto de la muerte

El fiscal ha señalado que el Ministerio Fiscal ha puesto el foco en lo que denomina el "quinteto de la muerte" de la seguridad vial: móvil, alcohol, drogas, psicofármacos y velocidad. Aseguró que "estas tragedias le pueden suceder a cualquiera, pero son evitables. Hay que evitar que exista el sentimiento de impunidad y de indiferencia ante las normas de tráfico".