El Colegio de Mediadores de Barcelona se sumó ayer a la iniciativa Programa Social de Empleo que promueve la Fundación Mapfre. Se realiza con el objetivo de contribuir a la inserción laboral de colectivos como los parados de larga duración y los jóvenes con discapacidad intelectual y enfermedad mental.

En el encuentro Javier Solís, de la fundación, agradeció al colegio su compromiso con la plena integración de las personas más necesitadas y su apoyo con la formación y el futuro profesional de las mismas. El presidente del colegio, Lluís Ferrer, destacó la labor llevada a cabo para normalizar la vida de estas personas y contribuir para acabar con las barreras que les impiden ser más independientes y felices; barreras que "no tienen que ver con su falta de capacidad laboral o profesional, sino con la falta de confianza y apoyo de la sociedad", ha dicho.

En Barcelona, desde 2013 las pymes, autónomos y entidades sociales se pueden beneficiar de las ayudas a la contratación de Fundación Mapfre con el objetivo de facilitar un puesto de trabajo a los parados de larga duración.