El director de la Entidad Nacional de Seguros Agrarios (Enesa), José María García de Francisco, afirma que la "Administración General del Estado sigue apostando" por los seguros agrarios subvencionados, una de las políticas "estrella" del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente. Pero los seguros agrarios cuentan con 200 millones de euros, el 18% menos que en 2012. Además, se ha establecido un límite mínimo, por el cual un seguro se empieza a subvencionar a partir de los 60 euros, y se han suprimido bonificaciones a los recargos impuestos en las explotaciones con exceso de siniestros, entre otros ajustes.

Los siniestros en el campo provocaron pérdidas superiores a los 800 millones de euros en 2012 y, pese a que la partida pública para subvencionar los seguros rondaba los 250 millones, los productores percibieron más de 700 millones en indemnizaciones. "El asegurado da el parte en 7 días y a los 50 recibe la indemnización, un tiempo récord gracias a esta asociación pública-privada", señala. Enesa estudia asegurar pérdidas en apicultura por el abejaruco, o ampliar la cobertura de los Daños por los Incendios Forestales mediante líneas relacionadas con la protección de dehesas o de encinas, pero no un seguro contra robos en el campo. A largo plazo no descarta la puesta en marcha de seguros de Renta para afrontar la volatilidad en los precios de las materias primas.