En solo una semana han sido denunciados 1.865 conductores por agentes de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil por conducir habiendo consumido alcohol o drogas. En 7 días se realizaron un total de 137.253 pruebas. De todos los conductores denunciados, 516 dieron positivo a drogas y 1.349 en alcohol.

La DGT ha impulsado una campaña de vigilancia con un claro objetivo: “poner fuera de la red viaria a aquellos conductores que habían bebido o consumido droga”. Se realizaron 1.657 pruebas de detección de drogas a conductores que presentaban algún síntoma de haber ingerido alguna sustancia, habían cometido alguna infracción o que se habían visto implicados en un accidente. El test salival para comprobar la presencia en el organismo de drogas dio positivo en 516 casos. Entre las drogas más consumidas están el cannabis (402 casos), cocaína (175 casos), anfetaminas (53 casos), opioides (29) y metanfetaminas (26). En 169 casos los conductores dieron positivo a varias de estas sustancias.

En cuanto a alcohol, se realizaron 135.596 pruebas de control de alcoholemia y 1.349 conductores dieron positivo.

Dos casos especialmente peligrosos y preocupantes

La DGT llama la atención sobre dos de los casos. En uno de ellos, los agentes de la Guardia Civil del Destacamento de Badajoz pararon al conductor de un autobús de transporte escolar, tras cometer una infracción a la Ley de Seguridad Vial. El conductor, que tenía previsto recoger a los alumnos de un centro docente, fue sometido a las pruebas para detección de presencia de alcohol y drogas. El resultado fue positivo en sustancias estupefacientes.

En el segundo caso, en un control en Alicante los agentes detuvieron un turismo que circulaba por una carretera. El conductor dio positivo a alcohol con un resultado de 1,49 mg/l en la primera muestra y 1,62 mg/l en la segunda, lo que representa una tasa seis veces superior a la permitida.