La industria europea reclama soluciones a Solvencia II

Representantes de la industria europea de seguros han enviado una carta al Comisario de Mercado Interior y de Servicios, Michael Barnier, instándole a abordar con urgencia los problemas que se han constatado, a causa de un enfoque excesivamente rígido y conservador, en el proyecto de medidas de ejecución que desarrollará la Directiva Solvencia II.

En la carta, la industria representada por el Comité Europeo de Seguros (CEA), el Foro Pan Europeo de Seguros formado por los CEOs de las primeras compañías aseguradoras (PEIF), el Chief Financial Officers (CFO Forum) y el Chief Risk Officers (CRO Forum), se reitera el apoyo a los principios de Solvencia II y su voluntad de colaborar con la Comision y la Eiopa para resolver los problemas detectados que han evidenciado el QIS5.

L
a industria aseguradora considera que se deben corregir varios desequilibrios. Entre ellos, creen que se penaliza en exceso la capacidad de las aseguradoras para ofrecer productos a largo plazo en especial aquellos destinados a la jubilación; afirman que los excesivos requerimientos de capital pueden frenar el crecimiento diversificado de las aseguradoras; y consideran que el marco prudencial que se prevé actualmente en el proyecto de Reglamento es inconsistente y volátil, sin que por ello se refuerce la protección a los consumidores y afectando además a las estrategias de inversión de las compañías. También existe un desajuste de la valoración, que además es volátil, de los activos que están garantizando compromisos a largo plazo.

Ante esta situación, las aseguradoras europeas consideran que es necesario introducir una extrapolación adecuada de la curva de tasa libre de riesgo, medidas para mejorar la calibración de la prima de iliquidez y para reducir la excesiva volatilidad de la valoración de activos, entre otras, que permitan un mejor ajuste en los requisitos de capital. Para los ramos de No Vida, el CEA también ha presentado propuestas relacionadas con la valoración del riesgo de catástrofes ya que, a su juicio, tal y como está en la actualidad, penaliza artificialmente el consumo de capital de las entidades sin reflejar adecuadamente el riesgo.