Mapfre defiende los beneficios fiscales para el seguro de Salud

El consejero delegado de Mapfre Familiar, Francisco Marco, ha defendido la necesidad de beneficiar fiscalmente al seguro de Salud privado, no sólo en el ámbito de las empresas sino que considera que también los ciudadanos particulares deberían poder desgravar por la contratación de estas pólizas. Según ha argumentado, la desgravación fiscal favorecería que un mayor porcentaje de la población cuente con un seguro privado, lo que ayudaría a descargar la sanidad pública. Francisco Marco realizó estas declaraciones en la presentación de un estudio realizado por Mapfre para conocer la opinión de los ciudadanos sobre la salud y la sanidad pública y privada.

Entre las conclusiones del estudio, destaca el hecho de que 7 de cada 10 encuestados cree que el seguro privado es el mejor complemento a la sanidad pública. Pero a pesar de ello, también 7 de cada 10 no tiene seguro privado. No obstante, un 21% afirma que piensa contratarlo, y del 80% que no tiene esta intención afirma que no lo adquiere por falta de recursos económicos. En este sentido, el consejero delegado de Mapfre Familiar ha afirmado que todas las aseguradoras están cambiando la forma de trabajar el seguro de Salud. En concreto, Mapfre, frente al seguro de ‘traje único’ destinado principalmente a las rentas más altas, está potenciando un modelo para incluir a perfiles de población más amplios, entre ellos los rentas medias-bajas, lo que, según ha explicado, supone un “trabajo especial”.

Del estudio también se desprende que al 80% de la población le preocupa la sanidad y un amplio porcentaje considera que es insostenible y hay que reformarla, aunque el 77% cree que no se debe recortar el gasto en sanidad. El mayor problema de los ciudadanos respecto a la sanidad pública se concentra en el acceso a especialistas o pruebas complementarias. De hecho, del informe se desprende que personas sin seguro de Salud pagan por ir a la medicina privada ante las largas listas de espera en estos ámbitos También se ha apreciado una tendencia creciente a acudir a urgencias para evitar esas listas de espera, lo que encarece aún más el sistema público. Además, 7 de cada 10 encuestados está en contra del copago en las recetas, si bien esa relación se reduce hasta 4 de cada 10 en el caso de que el copago se establezca en función de los ingresos. Y en cualquier caso rechazan el copago por la frecuencia en acudir al médico porque consideran que perjudica a los más enfermos.