Los directivos españoles se muestran totalmente divididos sobre los beneficios o complicaciones del proyecto legislativo de la UE por el que las microempresas estarían exentas de la obligación de depositar sus cuentas anuales en el Registro Mercantil. Crédito y Caución e Iberinform han elaborado un primer estudio para recabar la opinión de los directivos españoles: Cuatro de cada diez entrevistados están a favor que las empresas con facturación inferior al millón de euros queden exentas de ese depósito, y otos cuatro rechazan esa opción. Incluso advierte una polarización "absoluta": El 28% de los profesionales están muy en desacuerdo con la medida y le dan la mínima puntuación mientras el 33% se muestran muy de acuerdo.

Se considera microempresas a aquellas cumplen al menos dos de las siguientes tres condiciones: contar con menos de 10 empleados; tener una facturación inferior a un millón de euros; o que su balance sea inferior a los 500.000 euros. Se estima que en España cerca del 75% de 1,3 millones de empresas existentes son microempresas al encuadrarse en esa definición.

Los impulsores del estudio aclaran que "la división de opiniones entre los profesionales españoles reproduce, en realidad, el propio debate europeo. La propuesta busca disminuir los recursos que las microempresas europeas dedican a lo que consideran, procesos burocráticos que no les aportan valor para que puedan orientarlos hacia tareas vinculadas con su crecimiento". Además, si en todos los Estados miembros se eximiera a las microempresas de presentar las cuentas anuales, el ahorro económico se estima que rondaría los 6.300 millones de euros.