Moody’s ha subido la calificación de fortaleza financiera de SCOR y varias filiales a A1 desde A2 y la de la deuda subordinada desde Baa1 hasta A3, con todos los ratings con perspectiva estable. Según destaca la agencia, la decisión refleja “la fortaleza de su franquicia, la consistencia de su buena rentabilidad junto a unos resultados poco volátiles y una muy buena flexibilidad financiera, al tiempo que mantiene la diversificación del negocio, una relativamente conservadora cartera de inversiones y una buena capitalización”. Denis Kessler, presidente y CEO de la compañía, ha comentado sobre la decisión de Moody’s que es “otra confirmación más de la fortaleza financiera de SCOR. Claramente muestra la relevancia de nuestra estrategia y la elección de nuestro modelo de negocio y financiero”.