Los denominados ciberataques son una realidad que amenaza a las empresas de todo el mundo y los avances en la tecnología de la información con la incorporación de nuevas aplicaciones suponen también la creación de nuevos riesgos. Munich Re alerta sobre esos riesgos y desafíos crecientes para las empresas y advierte que implican una amenaza en cuanto a pérdidas en volumen de ventas y también por el daño reputacional. Alerta que sólo en 2011 fueron robados más de 232 millones de registros de datos personales, en su mayoría de registros de personas en Estados Unidos. Las estimaciones del Instituto Ponemon indican que el coste medio del robo de esos registros se sitúa en torno a los 200 dólares por persona. "Un seguro adecuado contra la mala utilización de los datos debe ser un elemento estándar del seguro comercial, al tratarse de un entorno en el que cualquier empresa puede sufrir una pérdida por deterioro de volumen de negocios o de su imagen", insiste Thomas Blunck, miembro del Consejo de Administración de Munich Re.