Las 13 rampas más pronunciadas para los corredores de seguros en su particular Angliru

En el último Congreso Comercial de Espabrok, se ha alertado a las corredurías asociadas de que están conviviendo en un mercado complejo, arduo y lleno de obstáculos. Luis López Visús, director general de la organización, lo ha llegado a comparar con esas etapas ciclistas diseñadas para el sufrimiento, pero en las que también se puede alcanzar la gloria si se resiste a las rampas más duras subiendo a ritmo y apostando por el desarrollo adecuado.

"Es un mercado que veo en curva, una curva en la que ya estamos y con salida en alza. Y, además, se avecina lluvia", vislumbra López Visús, haciendo una metáfora con ese pelotón que encara una curva en un puerto de empinadas cuestas y que no ha salido de una cuando ya tiene que encarar la siguiente.

Pero en todo caso, ese pelotón acaba superando cada una de las rampas infernales que se encuentra por su camino hasta llegar a la cima. Y lo hacen regulando el esfuerzo, con el mejor equipamiento y tirando todos juntos. "En Espabrok estamos preparados y con optimismo", subraya el director general de la organización de corredurías, que añade: "Conectados somos más capaces de superar retos". Si bien, manda un mensaje a quienes ven con temor las curvas que vienen a continuación, pero aún no saben cómo afrontar la curva en la que están inmersos. "Si todavía estamos pensando en el futuro es que estamos atascados", advierte López Visús.

Y como ocurre con los puertos míticos del ciclismo, Espabrok y algunas de sus corredurías asociadas han puesto nombre a esos tramos con los desniveles más altos. Si la Cueña Les Cabres es el tramo más temido del Angliru, éstas son las pendientes más pronunciadas en el ascenso que está afrontando la mediación de seguros en su particular puerto de montaña.

13 grandes retos

La primera de ellas abarca todos los retos que tienen que ver con el negocio. Para Jessica Palma, de la Correduría Palma e Hijos de Sabadell (Barcelona), "crecer" es el mayor "reto y propósito" que tiene esta empresa de mediación de carácter familiar. Y Serafín Trápaga, gerente de Aseguras (Asesores de Seguros de Santander), empresa ubicada en la capital de Cantabria, señala otro reto relacionado: "Buscar la rentabilidad del negocio". Estos son dos ejemplos de retos vinculados con el negocio y que son unánimes en todas las corredurías.

La segunda rampa es luchar contra nuevos competidores. "Hay competencia de todo tipo", resalta Serafín Trápaga (Aseguras), que confía en las aptitudes de los corredores de seguros: "Hay que procurar centrarnos en lo nuestro, estar al lado del cliente y utilizar todas las herramientas que nos facilita Espabrok".

Otro reto está relacionado con la formación y especialización que se requiere cada vez más en este mercado tan competitivo. Jessica Palma (Palma e Hijos) es consciente de ello: "Nos incorporamos a Espabrok para ganar crecimiento, especializarnos en el ramo de Empresas y formar un equipo con talento".

Un cuarto repecho lo conforman el conjunto de retos tecnológicos, que han adquirido aún más fuerza si cabe con la pandemia. José Antonio Buzón, CEO de Cohebu, correduría de seguros con sede principal en Sanlúcar de Barrameda (Cádiz), tiene claro lo que significa para él y su empresa la tecnología. "Mi reto es y sigue siendo la digitalización. Es una pieza básica en el día a día", precisa.

José Antonio Buzón (Cohebu) relaciona la digitalización con otro reto que persigue cualquier empresa, como es alcanzar eficiencia. "La digitalización ayuda a ser más eficientes y eficaces", indica. E insiste: "Con la digitalización se gana en efectividad, en recursos…".

La gestión de talento y contar con un plan de sucesión óptimo para garantizar el futuro de la empresa es otro gran desafío para muchas corredurías. En la correduría sabadellense Palma e Hijos no tienen ese problema, pero sí saben lo que significa ya que en ella conviven dos generaciones. "Llevo casi 20 años al lado de mi padre", cuenta Juan Manuel Palma, que comparte nombre con su progenitor y fundador de la empresa, del que ha aprendido la profesión. "Me ha enseñado valores, profesionalidad, adaptarnos a todos los cambios y estar al lado de los clientes", enumera.

Aportar valor al cliente para lograr su satisfacción y lealtad es otra cuesta dura en el itinerario de las corredurías de seguros. "El objetivo es prestar un buen servicio al cliente", resalta Serafín Trápaga (Aseguras), que profundiza: "Es un reto principal dar un buen servicio al cliente, conocerlos muy bien y usar bien las herramientas para darles lo que necesitan casi antes de que nos lo pidan". Y prosigue: "El reto es estar muy cerca de los clientes, tener confianza y que vean profesionalidad".

Hasta aquí van 7 retos que deben asumir las corredurías de seguros para operar en este mercado en constante evolución, pero en Espabrok añaden otros 6, algunos relacionados con los anteriores. Son los siguientes: apostar decididamente por la innovación, buscar oportunidades, implementar la omnicanalidad, adaptarse al amplio marco jurídico, acondicionar la estructura empresarial a las nuevas realidades y dominar la gestión activa.

Quizás toque retorcerse un poco en algunas rampas pero, con la combinación adecuada de platos y piñones, los corredores de seguros lograrán la cadencia de pedaleo apropiada para coronar el puerto.

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