Las 5 principales preocupaciones para la alta dirección

Los ciberataques y la pérdida de datos son los mayores riesgos a los que se enfrentan los principales ejecutivos de las empresas, según se extrae de una encuesta mundial realizada de manera conjunta entre Willis Towers Watson y el despacho de abogados Clyde & Co. Para la elaboración de este estudio, se han encuestado a altos ejecutivos de Reino Unido, Europa, Asia Pacífico y Estados Unidos.

En concreto, los ciberataques se han convertido en el riesgo más temido, como reconoce el 56% de los ejecutivos entrevistados. A continuación, se sitúan la pérdida de datos (49%), el riesgo normativo (46%), el riesgo de salud y seguridad (41%) y el riesgo de reclamaciones de empleo (38%). Estas dos últimas se cuelan por primera vez en este listado a consecuencia de la pandemia.

En este estudio se constata que el riesgo normativo y de litigio sigue siendo un reto para las organizaciones, ya que la diversidad de los consejos de administración es ahora obligatoria para la mayoría de las empresas.

No obstante, la preocupación por los ciberriesgos y por la pérdida de datos es significativamente mayor entre los ejecutivos europeos, aumentando hasta el 72%. "La explicación podría estar en el impacto del Reglamento General de Protección de Datos. En 2020, y a principios de 2021, hemos empezado a ver multas significativas por parte del regulador holandés, francés, alemán, italiano, español, sueco y británico, que oscilan entre los 50 millones de euros y los 750.000 euros", ha argumentado Ulysses Grundey, director asociado de FINEX en Willis Towers Watson.

A pesar de las especulaciones sobre una posible ola de insolvencias, sorprende que la preocupación es menor en comparación con la última encuesta. "Aunque la encuesta sugiere que administradores y directivos están algo menos preocupados por la insolvencia, observamos preocupación entre las aseguradoras por si las reestructuraciones empresariales o financieras, la pérdida de puestos de trabajo y las insolvencias pudieran desencadenar investigaciones sobre la conducta de los directivos y derivar a reclamaciones de D&O", ha explicado Ulysses Grundey.