El 64,8% de la cartera de las aseguradoras, ‘pillada’ en deuda española

El seguro español tendrá un grave problema si España es intervenida y se ‘decreta’ una reducción de su calificación crediticia. Según los últimos datos de ICEA, a finales de marzo la exposición del sector en renta fija era del 64,4%; y por países, España representa el 64,8% frente al 57,6% de un año antes, un incremento que se ha producido como consecuencia del aumento de la rentabilidad de la deuda española respecto a los bonos no nacionales, lo que está vinculado al ascenso de la prima de riesgo, que a su vez mide la desconfianza en la economía española, que ahora es muy elevada. Según destacó Juan José Toribio, director de Fundación IESE, en la jornada ‘Inversiones financieras en el sector asegurador’ organizadas por ICEA, existe un 50% de posibilidades, o incuso más, de que España sea intervenida: “Todo parece estar empujando hacia algún tipo de intervención”. Y si esto ocurre el seguro español podría tener un serio problema.

En este contexto la mejor estrategia, según Antonio Martín, director de Análisis e Investigación de ICEA, es mantenerse en la ‘manada’, es decir, seguir lo que hace el resto del sector, mantener una posición similar a la de los competidores. ¿El motivo? Es la estrategia que aporta mayor seguridad porque, según destaca Antonio Martín, la normativa siempre tiende a adaptarse a lo que, de forma general, hace la industria: “No es razonable que se deje caer al sector en su conjunto como consecuencia de la normativa actual”. Por ejemplo, en estos momentos, según la Orden EHA/339/2007, las compañías de seguros pueden invertir en deuda con calificación AAA, AA, A y BBB, pero si la situación empeora no es descartable que se flexibilice este criterio para impedir un desastre en el sector.

La situación se puede complicar aún más porque, además de la deuda pública española, el sector asegurador tiene una elevada exposición al sector financiero, industria en pleno proceso de rescate por parte del Eurogrupo. En concreto, a finales de 2011 el 40,18% de las inversiones de las aseguradoras estaba concentrado en el sector bancario. Según reconoce el director de Inversiones de Aegon España, Ignacio Perea, el elevado peso en la cartera de la renta fija pública y el sector financiero es “otra andanada en la línea de flotación”. Ante esta situación, lo que recomienda este experto es diversificar las inversiones. Le gustan especialmente las cédulas hipotecarias, y sobre todo ve mucho potencial en el ‘proyect finance’ debido a que con Basilea III a los bancos les supone una gran carga de capital invertir en determinados proyectos, lo que en el actual contexto les está obligando a desinvertir y, a su juicio, el sector asegurador podría tomar el relevo.

José Antonio Sánchez, director general de ICEA, también destacó en la clausura de las jornadas, que en el caso de que se ponga en duda la deuda española habrá un problema, pero descartó que se llegué a una situación dramática. José Antonio Sánchez reclamó a las aseguradoras crear nueva demanda a través de la innovación con el fin de estar ‘pegados’ a las necesidades del consumidor: “Hay núcleos de población no atendidos por el sector”. A su juicio es la solución para hacer frente a las dificultades para crecer y el estrechamiento de los márgenes que marcarán la evolución del sector en los próximos años.