7 consejos de Cigna para viajar con tranquilidad en Semana Santa

Llega la Semana Santa y el departamento médico de Cigna hace las siguientes recomendaciones para viajar sin sobresaltos:

- Tramitar los documentos para recibir atención médica en el extranjero. Todos los centros públicos de la UE, Islandia, Liechtenstein, Noruega y Suiza están incluidos en la cobertura de la Tarjeta Sanitaria Europea, por lo que simplemente tendrá que solicitarse en cualquier centro sanitario español o en el Instituto Social de la Marina. Otra opción, en caso de no contar con tiempo para tramitar la tarjeta, es solicitar un Certificado Provisional Sustitutorio, ya que tiene la misma cobertura pero sólo es válido durante 90 días. Fuera de la UE, España tiene acuerdos con Andorra, Brasil, Chile, Ecuador, Marruecos, Perú y Túnez. Si el país de destino no cuenta con ningún convenio sanitario con España, como EEUU, lo mejor es contratar un seguro médico.  

- Revisar la cobertura del seguro de Salud. Si ya se cuenta con un seguro de Salud, lo más probable es que cubra la asistencia en el extranjero. No obstante, se deberán abonar los gastos derivados de la visita al médico, que serán reembolsados una vez se regrese a España. Para ello, no hay que olvidar pedir las facturas de los servicios recibidos y los informes médicos.

- Vacunarse antes de viajar a ciertos países. Lo mejor para saber qué vacunas hay que ponerse es informarse en el centro de salud más cercano. Además, hay que ser previsores y hacerlo con tiempo, ya que alguno de estos tratamientos se aplica durante varias semanas antes del viaje, como ocurre en el caso de la Hepatitis A, cuya vacuna se administra de 2 a 4 semanas.

- Llevar una historia médica actualizada. Es muy importante informar a los profesionales si se está tomando algún tratamiento que pueda producir efectos secundarios o si se tiene alergia a determinados compuestos. Una buena medida de prevención es informar debidamente a los acompañantes y llevar encima en todo momento un informe en papel y digital.

- Investigar el destino en materia de medicamentos. Si se padece alguna enfermedad crónica y se viaja al extranjero, es preciso llevar consigo documentación que especifique la enfermedad, el tratamiento y los medicamentos que se estén tomando (siempre el nombre genérico), ya que puede ocurrir que dicha medicina no sea legal en el país de destino. 

- Adquirir un botiquín. Nada mejor que un pack de primeros auxilios para salir del paso y curar una herida producida durante el viaje. No pueden faltar en el botiquín gasas, algodón, vendas, tijeras, agua oxigenada o alcohol ni un antiséptico.

- Cuidado con los alimentos y agua que se consumen. Antes de viajar a cualquier país extranjero hay que tener en cuenta una premisa fundamental: cuidado con la comida y el agua. Si se va a comer fuera, es conveniente elegir adecuadamente el restaurante y evitar alimentos de puestos callejeros cocinados sin ningún tipo de control sanitario. En cuanto al agua, si se tienen dudas de la calidad del agua del grifo, es recomendable tomar agua mineral embotellada.